REFUTANDO “LA REFORMA APOSTÓLICA DEL NUEVO MILENIO” DE RONY CHAVES. 1ª
La mayoría de las congregaciones evangélicas, tenemos en nuestros estatutos, o en nuestras declaraciones de fe, la sana doctrina de nuestro Señor Jesucristo por escrito. Esto es un hecho. Lo triste es que algunos, tienen y defienden esa misma doctrina, pero a la par, defienden y creen otra doctrina, que incluso contradice la bíblica, y seguramente no se percatan de ello.
Creen diferentes y contradictorias doctrinas al mismo tiempo.
Me gustaría aquí dar un ejemplo específico, sin ningún ánimo de molestar a nadie, sino simplemente para que podamos incidir y entender más acerca de lo que estoy comentando.
El Ministerio Internacional C.E.D, de Chile, da públicamente a conocer su declaración de fe en su página web, la cual, es muy fiel a la revelación escritural, incluso en cuestiones de profecía bíblica. En su declaración, incluye el Arrebatamiento de la Iglesia, los diferentes eventos del libro de Apocalipsis, como son: acerca del Anticristo, el falso profeta, el reino milenial, y también menciona la salvación ulterior de Israel, etc. (1) Todo ello, me sorprendió gratamente.
Lo chocante, es que junto con esa declaración de fe correcta y ajustada a la verdad del Señor, este ministerio en concreto, paralelamente, cree y enseña la llamada “Nueva Reforma Apostólica”, con su consiguiente cuerpo doctrinal, que obviamente, se da de bruces con la profecía bíblica entre otras cosas, y justamente esto es lo desconcertante. Eso mismo ocurre con otros ministerios de similar postulado.
Como decimos, sin ningún ánimo de levantar mala crítica, y siempre bendiciendo a las queridas personas que componen en concreto dicho ministerio, nos damos cuenta de que es del todo incompatible el creer la sana doctrina de nuestro Señor Jesucristo, y la doctrina de los “nuevos apóstoles”.
Para ahondar en esta cuestión, me ha parecido apropiado examinar uno de los muchos artículos que Rony Chaves ha escrito para defender su doctrina “novo apostólica”, la cual también está en la página web del ministerio anteriormente citado (*)
(*) Si quieren ustedes leer todo ese artículo de Chaves, lo encontrarán en las direcciones cibernéticas destacadas en la sección “notas” (2)
El artículo en cuestión se llama:
“LA INEVITABLE, NECESARIA E IMPRESCINDIBLE REFORMA APOSTÓLICA DEL NUEVO MILENIO”
por Rony Chaves.
Quizás Chaves podía haber añadido más adjetivos al enunciado de su artículo, pero inevitablemente el título hubiera sido todavía más estirado de lo que ya es.
Rony Chaves
Con la ayuda del Espíritu Santo, y en todo dando la gloria y el honor al Padre de nuestro Señor Jesucristo, vamos refutar muchas de las declaraciones de Chaves, con la verdad de la Palabra de Dios.
Empieza Rony Chaves haciendo mención del pasaje bíblico de 1 Corintios 12: 28, sesgado, tal y como lo transcribimos a continuación:
<
Con ese pasaje, que sólo es un versículo (a medias) y que en un momento pasaremos a comentar, Chaves nos argumenta todo lo que viene a continuación, que no es poco, diciéndonos que:
- La más grande “Ola Apostólica” está llegando a nuestras naciones.
- Que el Espíritu Santo, “está empeñado en impartir a Su Pueblo el Espíritu Apostólico de Cristo”
- Que esa “Ola Apostólica” proveniente del Espíritu Santo, quien es un “Espíritu Apostólico” (la palabra apóstol la coloca por todas partes para que no se nos olvide, hasta califica al Espíritu Santo de “apóstol”), desatará una Nueva Reforma Apostólica en este Siglo XXI.
Pero vayamos por partes. El apóstol Pablo, quien sí podía llevar ese título a causa de ser designado por Cristo para traernos la revelación de la Palabra, nos habla primeramente de los apóstoles.
¡Tantas veces ya hemos explicado que el vocablo “apóstol” es una transliteración (es decir, copia) de la palabra griega “apostolos” que significa en español, “enviado” o “mensajero”!
Debemos por tanto entender que los “apóstoles” a los cuales se está refiriendo Pablo en ese versículo, aparte de los doce de Cristo, son los otros misioneros o enviados que hacían la obra de apostolado, cual fue y es: Predicar el Evangelio allí donde nadie lo había hecho con anterioridad (Ro. 15: 20, 21), y como resultado de las conversiones a Cristo, constituyendo ancianos para el gobierno espiritual de las congregaciones recién nacidas (ver Hchs. 14: 23)
Así mismo también nos lo dice el comentarista de Matthew Henry de forma aún más reticente: <
Hoy en día eso último sigue, sólo para aquellos que hacen lo mismo que hicieron aquellos primeros misioneros (apóstoles). Pero como ustedes comprenderán, todo esto dista mucho, ¡pero mucho!, de las pretensiones y enseñanzas de Chaves y de otros como él.
(1 Corintios 12: 28) <<…luego profetas …>>: Dicho sea de paso, en cuanto a los profetas mencionados en el versículo en cuestión, estos “consuelan y confirman a los hermanos con abundancia de palabras” (leer Hchs. 15: 31); es decir, ayudan a los nuevos convertidos a entender la verdad del Evangelio en toda su dimensión; jamás traen nueva revelación, como dice Chaves, sino que enseñan la que ya Dios nos ha dado, ayudando a la edificación del cuerpo de Cristo allí donde ese ha sido formado. Obviamente ese ministerio de confirmación era muy necesario en aquellos tiempos cuando la Biblia, en su versión neotestamentaria no existía todavía (se estaba escribiendo)
Habiendo visto que es lo que realmente quiere decir ese versículo, y siempre a la luz del resto de la revelación bíblica, ya que un texto fuera de contexto, es un pretexto, pasemos a analizar con detenimiento lo que defiende Chaves.
A diferencia de lo que en realidad ese versículo quiere decir, y sacándolo absolutamente de contexto, Chaves nos promete basándose en él, <
¿La nueva Ola Apostólica?
Contrariamente, Chaves dice que esa “Ola y Reforma Apostólicas”, consecuencia directa de la obra del Espíritu Santo, quien <<está empeñado en impartir a Su pueblo el Espíritu Apostólico de Cristo>> (extraña expresión atribuida al bendito Espíritu Santo, el cual no tiene necesidad de “empeñarse” en nada), provocarán varias cosas principalmente, dice:
1. <
Estos “Apóstoles” como dice Chaves, no son los que van al campo de misión, sino que son hombres todos ellos integrantes en diversas redes, llamadas “apostólicas”, que a la vez están integradas en otras, y así sucesivamente, con lo que se pretende conformar un tejido de jerarquía y mando “espiritual”, que a la postre se va a traducir (y así es en muchos casos ya) en un sistema de control que jamás la iglesia ha conocido con anterioridad. Y no estamos exagerando aquí.
2. <
Esa “Ola y Reforma Apostólicas” harán eso, dice Chaves. La expresión “Espíritu Apostólico de Cristo” no viene como tal en la Biblia, pero sí sabemos que Cristo es la Cabeza de la Iglesia, por lo tanto, lo que entendemos que Chaves está diciendo es que se levantará en la Iglesia un cuerpo gobernante, y la formación de una iglesia autócrata.
Este posicionamiento doctrinal es netamente diabólico. Se llama “Cristo corporizado en la Iglesia”, y viene originalmente de una corriente absolutamente herética llamada “The Manifest Sons of God” (Latter Rain Movement), que enseña que Cristo ya no es preciso que vuelva a este planeta, porque Su Espíritu está en la Iglesia, y la Iglesia es Su cuerpo. Esa doctrina enseña que la máxima manifestación de Cristo en la Iglesia es a través de los nuevos apóstoles y profetas, que componen su cuerpo gobernante. Son los “ungidos” que encabezarán la iglesia…
3.<
Ese punto define con mayor claridad el anterior.
Se supone que son esos “apóstoles” los que en definitiva establecen ese Gobierno Teocrático, ya que tal gobierno debería ser visible. Tal hecho es contrario a las Escrituras. Según Chaves, Dios, “contradiciéndose”, va a permitir que se instaure una jerarquía en la Iglesia de Jesucristo. A eso también le llaman el “Orden Divino”.
El G12, que no es otra cosa sino Gobierno de doce, es parte de toda esta infraestructura neo apostólica.
Pero, ese Gobierno Teocrático en esta dispensación, no puede ejercerse ni en la Iglesia, ni de la Iglesia para el mundo. ¡No nos engañemos! Un verdadero Gobierno Teocrático solamente lo puede ejercer Cristo el Señor en persona, y no hombre alguno en esta dispensación, por muy santo que sea. La Biblia enseña que Cristo lo hará cuando regrese en gloria (ver S. 2: 7-9; Dn. 2: 44, 45; 7: 13, 14; Mt. 25: 31-46; Ap. 11: 15; 22 etc.)
¡AHORA NO ES TODAVÍA EL TIEMPO PARA UN GOBIERNO TEOCRÁTICO EN ESTA TIERRA YA QUE LA IGLESIA TODAVÍA NO HA SIDO GLORIFICADA, Y LOS MUERTOS EN CRISTO TODAVÍA NO HAN RESUCITADO!
Jamás olvidemos de que la Iglesia que hay sobre la tierra, no es toda la Iglesia que existe, ¿qué hay de la que está en el Cielo? Tanto la Iglesia que está en el cielo como la que está en la tierra, está esperando el Tribunal de Cristo, el Enlace con Cristo y la glorificación, por ese orden. Los muertos, la resurrección; y los vivos, la transformación (2 Co. 5: 10; Ro. 14: 10; Ef. 5: 29-32; Ap. 19: 7, 8; 1 Co. 15: 12-20, 42, 43, 51-53; 1 Ts. 4: 13-17)
Es del todo incongruente pensar en un supuesto tipo de iglesia ya “glorificada” aquí y ahora en la tierra, condición sin equanum para poder establecerse un Gobierno Teocrático hacia sí misma y hacia el mundo, sin contar con todos los fieles en Cristo que ya partieron y que están esperando la resurrección de sus cuerpos. ¿Es que ellos no son también la Iglesia?
En otras palabras, solamente cuando vuelva Cristo en gloria, podrá Su Esposa, la Iglesia glorificada, que constará de los muertos en Cristo ya resucitados, y de los vivos en Cristo ya trasformados, y todos glorificados, reinar juntamente con Él. Ese reinar será el verdadero Gobierno Teocrático. Ese será el Milenio, y no olvidemos que Israel, recibiendo a su vez el Reino, será cabeza de las naciones en ese tiempo (Ap. 20)
El Gobierno Teocrático implica que Dios hace Su perfecta voluntad en esta tierra, ¿lo está haciendo ahora? Ahora todavía es el tiempo de orar: “Venga a nosotros Tu Reino, hágase Tu voluntad como en el Cielo, aquí en la tierra” (Mt. 6: 10)Y eso se cumplirá con la venida gloriosa de Cristo, en adelante.
Ni siquiera los doce de Cristo gobernaban teocráticamente. Si ellos no procedían así (porque no fueron llamados a gobernar sino a ser testigos de Cristo Hchs. 1: 8), ¿Cómo es posible que Chaves nos esté hablando de restaurar algo que jamás existió?
Y yo me pregunto, ¿Dónde están los maestros de la Biblia hoy en día? ¿Por qué no se levantan y denuncian estas tropelías? ¿Por qué no abandonan de una vez el “silencio de los corderos”, y como atalayas de Dios hablan con claridad confrontando toda esa falacia? ¿Por qué sólo somos muy poquitos, en proporción, los que nos atrevemos?
Sigue diciendo Chaves lo que la “Ola y Reforma Apostólicas” harán:
4. <
¡Esto es lo que más buscan la mayoría de los creyentes de corte neo pentecostal/carismático! Muchos están sedientos de señales y prodigios. Es lo que los judíos incrédulos más buscaban también: Las señales (ver Mt. 12: 38, 39; 16: 4; 1 Co. 1: 22a), y muchos eso es lo que tendrán; pero que nadie se equivoque, la inmensa mayoría de esas “señales y milagros extraordinarios” vendrán de parte de Satanás, porque así está escrito. El Señor Jesucristo nos lo advirtió:
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<<Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad…>> (2 Ts. 2: 8, 9, 10)
<
<
El diablo utiliza y utilizará lo “evangélico”
Creo que el diablo, utiliza y utilizará todo lo “evangélico” que pueda para llevar al límite su obra de engaño, perversión, profanación y burla. Todo lo que se asemeje más a lo que es genuino de Dios. Pienso que la última expresión de la Gran Ramera, será de tipo “evangélico” en gran medida; será el engaño más audaz de Satanás, ¡Dios le reprenda!
El diablo es un “espíritu” de costumbres. Lo mismo que hizo, vuelve a hacer. Ya lo hizo el diablo en el siglo IV, después de haber levantado mucha persecución a muerte contra los cristianos, y ver que no conseguía nada con eso. Lo que hizo entonces fue cambiar de estrategia, y en vez de perseguir a los creyentes, se “unió” a ellos. El diablo se hizo “cristiano” a través del emperador Constantino, y el resultado de todo ello fue el surgimiento de la iglesia católica; el peor de los engaños que ha durado muchos siglos. Lo mismo está ocurriendo hoy en día, y el problema es que la mayoría no se percata de ello.
A muchos, muchos ministros, les está pasando como a aquellos de la época del emperador Constantino, el verdadero primer papa de la historia, que dijo convertirse a Cristo, e hizo del “cristianismo” la religión oficial y única del Imperio Romano. ¡Tanto se alegraron aquellos infelices! Dijeron que por fin el Reino ya había venido (como ahora dicen). ¿Saben ustedes que ocurrió?, que los codiciosos de entre ellos, apostataron entrando a formar parte de las filas constantinianas, y el resto fue perseguido hasta la muerte, huyendo de aquí para allá. La historia es fiel testigo de eso.
Lo mismo está ocurriendo, y acabará ocurriendo en el tiempo de la Tribulación, cuando muchos se den cuenta de que fueron engañados (de nuevo). ¡¡Cuidado con la “nueva reforma apostólica”!! Por mi parte, ya lo estoy advirtiendo.
5. <
¿No suena eso a la “Compañía… de Jesús” (jesuitas)? ¿Desde cuándo Dios ha comisionado a la Iglesia a “establecer el Reino de Dios entre los pueblos”? ¡Por favor, no se dejen engañar!, ¡lean la Biblia! Dios nos ha comisionado, sí, pero a predicar el Evangelio y a hacer discípulos a las naciones, pero jamás a hacer algo que no podemos osar hacer: “Establecer el Reino”. ¡No tomemos el lugar de Cristo! Porque sólo Él establecerá el Reino, cuando regrese.
6. <
Esta es otra de las cosas que sólo Jesucristo puede hacer, y hará cuando regrese. Mientras tanto, nos guste o no, “…el mundo entero está bajo el maligno” (1 Juan 5: 19b), justamente a causa de que el Reino todavía no ha venido, porque el Rey no ha regresado aún.
Leemos en Ap. 20: 1-4 <
Todos los creyentes deberían saber que eso ocurrirá cuando Cristo regrese en gloria. Hasta entonces, NO es cierto que la Iglesia vaya a <<quebrantar el gobierno de Satanás entre nuestras naciones>>; ni siquiera la “Ola y Reforma Apostólicas” de Chaves ¿Dónde aprendió Chaves teología, para decir estas cosas que dice?
Pero sigue diciendo:
7. <<Acercarán los diseños y estrategias del cielo a la tierra. Esta Nueva Reforma Apostólica es necesaria. La Iglesia, sus líderes honestos y el Pueblo claman por ella. Es la opción divina de los "últimos tiempos", es el plan de Dios para el Nuevo Milenio. La Nueva Reforma Apostólica es imprescindible y además ya es indetenible. Nadie la podrá parar, viene del cielo, amén. Sólo con ella, la Iglesia en cada nación, estructurada bajo la Autoridad Apostólica, hará derrumbar el control esclavizante y el dominio satánico en nuestros pueblos>>
Si Dios no nos hubiese dado a conocer Su voluntad a través de la profecía bíblica, lo que dice Chaves tendría un pase; ¿A quién no le gustaría ver en este tiempo “el cielo en la tierra”, “que se derrumbe el control esclavizante y el dominio satánico en los pueblos”, etc.?
Pero la cuestión aquí, no radica en lo que como “Iglesia, líderes honestos, y pueblo” queramos o no, la cuestión radica en lo que Dios ha establecido, y en lo que es Su perfecta voluntad. ¡Dios sabe lo que hace!
El tiempo de la Iglesia prácticamente ya se ha cumplido. La Iglesia verdadera está a punto de ser llevada al cielo, y consiguientemente, Dios va a reemprender Su obra de salvación (Dn, 9: 27) con Israel.
Dios ha determinado un tiempo de juicio sin precedentes contra este mundo. Su ira santa será saciada, como lo hubo de ser con Amalec (1 S. 15). Ese será “el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios” (Ro. 2: 5)
Decir, contrariamente a lo que enseña la profecía bíblica, que la Iglesia va resolver el problema de injusticia de este mundo, sea con las “olas apostólicas” de Chaves o como sea, es una estupidez al máximo exponente, y me gustaría pensar que parte de una simple ingenuidad, por lo demás, de una segura ignorancia.
¡La Iglesia no trae la justicia perdurable a este mundo, la trae Cristo! (Dn. 9: 24; 7: 13, 14; 2: 44, 45), y lo hará en Su venida, para iniciar el Milenio (Ap. 19: 11-21; Ap. 20)
No hay peor ciego que el que no quiere ver, pero necesitamos ojos para ver lo que la Biblia dice, y no lo que presuntos hombres de Dios enseñan como bíblico, cuando no lo es.
Este es el tiempo en el que todos y cada uno de los creyentes somos desafiados a buscar con diligencia en la Biblia la verdad revelada por Su Autor, porque también es el tiempo de la máxima expresión de engaño y falacia que jamás la Iglesia de Jesucristo haya podido enfrentar en toda su existencia sobre la tierra, porque el engaño es muy parecido a la verdad, y suena como verdad.
No vale tener en una mano la sana doctrina de nuestro Señor Jesucristo, y en la otra falsa doctrina. No compensa, ni recompensa.
En una segunda parte, seguiremos analizando y refutando este artículo de Rony Chaves, a quien bendecimos orando que Dios le pueda llevar a los pies de la verdad de Cristo, y así la enseñe; también como a miles más.
Dios les bendiga.
Miguel Rosell Carrillo, Pastor de Centro Rey, Madrid, España
www.centrorey.org
Noviembre 2006
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