El obispo argentino Fernando María Bargalló, fotografiado en unas
románticas vacaciones en México junto con una mujer, pidió hoy perdón,
en medio de la investigación que ya inició el Vaticano.
Las cámaras de una televisora argentina mostraron la víspera al ex presidente de la organización humanitaria Cáritas Argentina al momento de besar a una mujer en una alberca de un hotel de lujo en Cancún.
Este miércoles, la cadena de televisión América 24 buscó al obispo, quien primero se negó a hacer declaraciones sobre el hecho, pero luego dio su versión.
Bargalló aseguró que las imágenes son de hace dos años, cuando viajó al Caribe mexicano para participar en la reunión del Secretariado Latinoamericano y Caribeño de Pastoral Social Cáritas.
"Las fotos responden en efecto a un encuentro en México, en donde coincidimos con esta amiga de mi infancia, con ella y su familia mantenemos vínculos de fuerte amistad", afirmó el prelado.
El cura lamentó la situación en que quedó envuelto y reconoció que su actitud no quedó exenta de “cierta imprudencia”, porque “pudo haber dado lugar a malas interpretaciones".
Pese a que las imágenes son explícitas, con besos y abrazos, el obispo ratificó su lealtad a los votos de castidad y de pobreza y subrayó que está “comprometido con Dios y con la Iglesia” católica.
Sin embargo, el nuncio apostólico, Emil Paul Tscherrig, ya presentó un informe al Vaticano, el cual evaluará la sanción que deba aplicarse a Bargalló.
fuentes.
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Las cámaras de una televisora argentina mostraron la víspera al ex presidente de la organización humanitaria Cáritas Argentina al momento de besar a una mujer en una alberca de un hotel de lujo en Cancún.
Este miércoles, la cadena de televisión América 24 buscó al obispo, quien primero se negó a hacer declaraciones sobre el hecho, pero luego dio su versión.
Bargalló aseguró que las imágenes son de hace dos años, cuando viajó al Caribe mexicano para participar en la reunión del Secretariado Latinoamericano y Caribeño de Pastoral Social Cáritas.
"Las fotos responden en efecto a un encuentro en México, en donde coincidimos con esta amiga de mi infancia, con ella y su familia mantenemos vínculos de fuerte amistad", afirmó el prelado.
El cura lamentó la situación en que quedó envuelto y reconoció que su actitud no quedó exenta de “cierta imprudencia”, porque “pudo haber dado lugar a malas interpretaciones".
Pese a que las imágenes son explícitas, con besos y abrazos, el obispo ratificó su lealtad a los votos de castidad y de pobreza y subrayó que está “comprometido con Dios y con la Iglesia” católica.
Sin embargo, el nuncio apostólico, Emil Paul Tscherrig, ya presentó un informe al Vaticano, el cual evaluará la sanción que deba aplicarse a Bargalló.
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