Los salones (o saloons) del salvaje oeste tienen sus propias reglas al otro lado de las puertas batientes. Corre el alcohol ilegal, vuelan las cartas marcadas, se pasean las mujeres de sonrisa fácil, toca el viejo pianista loco. Incluso es costumbre que, de vez en cuando, el sheriff se pase por allí y haga como que lo tiene todo controlado.
Cambien el salón por Wall Street y al sheriff por el fiscal general de Nueva York y tendrán la escena con la que se ha encontrado Eric Schneiderman, el nuevo enemigo público número uno del parqué más poderoso del mundo. Su cruzada contra el sistema financiero en busca de culpables de la ruina de tantos ahorradores le ha llevado a enfrentarse incluso a la Administración de Obama por ir demasiado lejos.
La semana pasada, de hecho, fue apartado del comité oficial que negocia con las grandes firmas una salida a la investigación que la justicia mantiene sobre ellas. La Casa Blanca quería cerrar un acuerdo ya (para dar sensación de estabilidad) y Schneiderman no lo veía claro porque eso le impediría llegar al fondo del asunto. ¿El resultado? El fiscal de NY queda fuera del comité.
Como marca la tradición del western, sus antecesores en el cargo ya se dejaron ver por el salón de Wall Street estrella en pecho. Daba buena imagen, eso de hostigar a las finanzas. Lo suficiente, por lo menos, para ascender en la carrera política, tal y como demostró Andrew Coumo, el predecesor de Schneiderman, ahora gobernador del Estado de Nueva York.
FUENTES:http://noticias.lainformacion.com/economia-negocios-y-finanzas/economia-general/eric-schneiderman-el-nuevo-sheriff-que-la-ha-tomado-con-el-saloon-de-wall-street_xDj4f2n0aKLF2O2NWH6ZR3/
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